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5 REMEDIOS CASEROS PARA EL CABELLO DAÑADO
by Alba Martín
Hace unas semanas te contamos algunas mascarillas caseras y sencillas para tu rostro, así que hoy vamos a hacer lo mismo pero para el pelo.
A veces pecamos en exceso de la plancha para el pelo o el secador, cosa que hace que éste se resienta profundamente, mostrándose seco, frágil, sin brillo, castigado y con las puntas abiertas y quebradizas. Pero es que sobre todo aquí en Canarias, las largas exposiciones al sol también nos afectan y agravan estos síntomas capilares.
Por ello es bueno aplicar mascarillas o remedios caseros con cierta frecuencia, para que nuestro pelo recupere su estado natural y luzca sano y bonito.
Aquí te traemos 5 formas útiles y económicas para lograrlo:
Mascarilla de aloe vera y cerveza:
Si notas tu pelo deshidratado, sin brillo, muy graso y muy estropeado, entonces ésta es tu mascarilla ideal
Ingredientes:
– Medio vaso de cerveza
– Dos tallos de aloe vera
– Aceite de oliva
Preparación:
Mezcla la pulpa del aloe vera con la cerveza y una cucharada de aceite de oliva. Cuando consigas una pasta uniforme, aplícala sobre el cabello desde la raíz hasta las puntas, insistiendo en el cuero cabelludo. Deja que actúe sobre el pelo durante 30 minutos y retira con abundante agua.
Tratamiento a base de mayonesa:
Es un remedio casero para el cabello dañado que ayuda a recuperar el brillo, la fortaleza y la humedad natural de nuestro pelo.
Para ello sólo tienes que aplicar mayonesa por todo el pelo mientras esté húmedo y mantenerlo 30 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, retíralo con agua tibia y lávalo como suelas hacerlo normalmente.
*Consejo: si la mayonesa es cajera, mejor que mejor.
Mascarilla de aguacate:
Esta mascarilla es útil para aquellas que tengan el pelo encrespado y puntas abiertas o quebradizas. Las vitaminas del aguacate ayudan a nutrir y reparar los daños del cabello.
Ingredientes:
– Aguacate
– Aceite de germen de trigo
– 1 plátano maduro
Preparación:
Machaca el aguacate junto con el plátano y añade una cuchara de germen de trigo. Un vez lista la mezcla, aplícala y mantenla durante una hora.
Enjuague capilar con vinagre de manzana:
También es una buena opción para el pelo dañado, ya que el vinagre ayuda a equilibrar el pH del pelo, aportando brillo y favoreciendo a la eliminación de la caspa.
Sólo tienes que diluirlo en agua y, con ayuda de un pulverizador, aplicarlo por todo el cabello.
Aceite de almendras:
Por sus propiedades naturales e hidratantes, ayuda a reparar el cabello dañado rápidamente. De esta manera recupera su fuerza, lo nutre y combate la sequedad y la caída.
Lo único que debes hacer es aplicarlo directamente sobre el pelo (una pequeña cantidad y bien repartido) o mezclarlo con miel y hacer una mascarilla, dejándola actuar 30 minutos y para luego retirarla con agua tibia.
Como habrás podido ver, son remedios muy sencillos, baratos y sobre todo naturales. Verás cómo tu cabello agradece mimos como estos con cierta frecuencia, y te recompensará con un aspecto sano, natural y envidiable.