Viernes, 6 de noviembre de 2015

Mañana Sábado 7 de noviembre. De 10.00 a 14.00 entrada libre a la pista para los menores de 12 años; y hasta las 23.00 para los mayores de 12. Las BMX podrán hacer uso libre y gratuito el domingo 8 de 10.00 a 15.00 horas. Estos horarios ayudarán a un mejor funcionamiento en el día de la apertura.

Lanzarote se convertirá este sábado 7 de noviembre en la Isla de referencia para los aficionados al skate, con una creciente implantación en Canarias «desde edades muy tempranas», como explica los hermanos Diego y Gustavo Rosende, gestores de Extreme Center, un parque de esta disciplina, que abre con rampas únicas en el Archipiélago como una bowl y big jump.

La pasión por el skate (disciplina con monopatín considerada aún en pocos países un deporte) no acaba con  la edad, «pero sí con las lesiones», asegura Diego Rosende, que logró el trigésimo puesto de la copa del mundo de Brasil de 2000, el séptimo en el Gran Prix de Suiza o el quinto en 1999 en su Argentina natal. El skater, que acaba de montar, junto a su hermano Gustavo, un parque de skate en la zona industrial de Playa Honda, se vio obligado a dejar la competición de alto nivel a consecuencia de  una rotura de ligamentos externos a los 21 años, aunque su vida siempre ha girado en torno a esta disciplina.

Hace unos años, y tras residir en la meca del stake, California, Diego recaló en Lanzarote, donde, junto a su hermano, ha elevado el nivel de la disciplina y la afición, a través de la creación de escuelas para niños de entre 3 y 14 años, en Arrecife, Teguise y Tinajo; la realización de un programa especializado, en la televisión local, construcción de rampas públicas, la gestión de una tienda para este mercado y la celebración de eventos como el ya histórico Famara Skate Contest, que logró reunir en La Caleta a 700 aficionados junto a grandes nombres del mundillo llegados de todo el país.

La empresa de los Rosende, Grow Producciones S.L., en la que participa activamente la esposa de Diego, Cilene Dos Santos, ha conseguido con este círculo virtuoso implantar el skate en la Isla, que ya cuenta con 80 alumnos menores de 14 años y culminar el proceso con la apertura del Extreme Center. El diseño del parque es de Diego, «junto a un buen carpintero que es aficionado», explican los hermanos y donde se encuentran joyas únicas en Canarias, como las rampas bowl (al estilo de las piscinas vacías, que aprovechaban los skaters californianos en las épocas de sequía) o la big  jump, «de tres metros de altura con una piscina llena de cilindros de gomaespuma para entrenar saltos en el aire antes de ir a rampa».

Las instalaciones cuentan con tienda y cafetería y son accesibles durante todo el día con precios entre los 35 euros mensuales y los 310 anuales.

Redacción: Periódico Canarias 7 

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