«Uno de los propósitos del grupo de gobierno del Ayuntamiento de Teguise, en este mandato, es el de estar del lado de las tradiciones, celebrando festejos en todos los pagos, atendiendo nuevas demandas, pero sin olvidar nuestro origen», esgrime el concejal de Festejos, Javier Díaz. Y un ejemplo de este propósito es la romería marinera de La Caleta de Famara que volvió a reunir a un nutrido grupo de anónimos atraídos por las parrandas, por la vestimenta tradicional costera y las ganas de afianzar sus lazos de unión y hermandad. 

Las calles del pueblo engalanadas para la ocasión fueron testigo de este transitar popular y festivo, en el que el intercambio de conversaciones, saludos o la espontaneidad de un cántico o de un baile, llevaron a los asistentes a condensar el respeto a los viejos modos y las nuevas prácticas sociales. 

Cada vez son más los que se suman a esta confraternización vecinal, en un punto cardinal -como La Celeta de Famara- que aglutina a vecinos, turistas y curiosos de otros municipios. A la misa en honor a la Virgen Sagrado Corazón de María- que congregó a muchos fieles- le siguió una noche de parranda con los grupos: Al Golpito, Pal Porrón y Son de Norte en la explanada del muelle.

Redacción y fotografía: Ayuntamiento de Teguise.

 

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